jueves, 9 de diciembre de 2010

Sintagmas fijados

por Maysa Moya

Según Helena Beristáin el sintagma es la combinación, en la cadena del habla,
de unidades lingüísticas pertenecientes a la primera articulación, los morfemas. En el libro Elementos de semiología Roland Barthes, sin embargo, hace una observación, tomando como referencia a Saussure: si el habla es un acto en el que el individuo utiliza la lengua, ¿por qué existen bloques o cadenas habladas que éste no tiene que formular, sino que el propio sistema le proporciona?

Se trata de los sintagmas fijados, “frases que pertenece [n] a la lengua y que el
individuo no tiene ya que construir él mismo”.

Barthes concluye: “si estos estereotipos pertenecen a la lengua y no ya al habla; y si está comprobado su uso abundante en muchos sistemas semiológicos, es preciso prever una lingüística del sintagma, necesaria para todas las escrituras fuertemente estereotipadas”.

En la lengua algunos sintagmas fijados son:

-Se me pegaron las sábanas
-Más vale aquí corrió que aquí murió
-Estás en la Luna
-Ya me cayó el veinte
-Ni muy muy, ni tan tan

En los sistemas semiológicos existen casos dignos de mencionarse. El sintagma fijado en el futbol se da cuando un jugador está lastimado dentro de la cancha, pero el árbitro no detiene las acciones. El equipo que tiene la posesión patea el balón afuera del campo, las asistencias médicas entran a atender al jugador lesionado. El equipo contrario reanuda el encuentro (puesto que reglamentariamente la posesión es suya), pero lo hace devolviéndole el balón a la escuadra que lo tenía antes de que entraran las asistencias médicas. La cadena de sucesos no es producida por el jugador o el equipo, pertenece al esquema de juego limpio dentro de este deporte.

Vean este curioso caso, en el que el jugador al querer devolver el balón, en lo que representaría el último paso para cumplir el sintagma fijado descrito arriba, mete un gol. Para compensar el fallo, la escuadra que cometió el error deja que el balón entre en portería propia sin poner oposición.

La lengua según Hjelmslev

En Elementos de semiología Roland Barthes apunta que para Louis Hjelmslev la dicotomía que Saussure había hecho respecto de la lengua/habla no tenía por qué fragmentarse. Sin embargo, redistribuyó los términos de manera más formal. Así, para el lingüística danés la lengua está constituida por tres planos: El esquema, la Norma y el Uso. El primero es el sistema en estado puro, es decir, los fonemas* que integran cada lengua. El segundo se refiere a la lengua como forma material, un sistema que está determinado por cierta realización social. Las normas que conforman la lengua están definidas por el habla y el uso. Mientras que la tercera es el conjunto de hábitos que hay en ciertas regiones respecto de una lengua. Por ejemplo, el uso del español en México no es el mismo que en Argentina o España. Este esquema, de vital importancia para el estudio semiológico, integrado por estos tres elementos, se opone al habla.


* Un fonema es la unidad mínima de la lengua que por sí misma no tiene significado, pero que al combinarse puede producir un número infinito de oraciones. Para Andre Martinet se trata de la segunda articulación de la lengua. La primera articulación es la que está conformoda por los monemas o morfemas, unidad mínima de la lengua con significado. En el español existen 22 fonemas: (1) a/ (2) b-v/ (3) c-s-x-z/ (4) d / (5) e / (6) f / (7) g / (8) i-y / (9) j-x / (10) k-q / (11) l / (12) m / (13) n / (14) ñ / (15) o / (16) p / (17) r / (18) rr / (19) t / (20) u / (21) ll-y y / (22) ch

miércoles, 8 de diciembre de 2010

La cultura como comunicación

Sesión 2

En La estructura ausente Umberto Eco menciona que la semiótica estudia la cultura y la sociedad como si se trataran de fenómenos de comunicación. La mención es fatal, pues a partir de entonces ningún elemento o acción que estén dentro de ellas podrán tomarse como accidentes. Todo comunica. Lo explica así: "En el momento en que el australopiteco utiliza una piedra para descalabrar el cráneo de un mono, todavía no existe cultura, aunque en realidad transforma un elemento de la naturaleza en utensilio. Digamos que surge la cultura cuando [...]: a) un ser pensante establece una nueva función de la piedra (no es necesario pulirla para convertirla en buril); b) lo «denomina» «piedra que sirve para algo» (no es necesario denominarla en alta voz o comunicarlo a los demás); c) la reconoce como «la piedra que corresponde a la función X y que tiene el nombre Y» (tampoco hace falta denominarla una segunda vez: basta reconocerlo).

Stanley Kubrick piensa algo parecido. Prueba de ello es una de sus secuencias de 2001, Odisea del espacio. La imagen muestra el inicio de la cultura. El mono descubre el potencial que el hueso de un animal tiene como arma de destrucción. Asimismo, el hueso representa el primer elemento de la naturaleza que se convierte en un signo. (La música, así como la elipsis de las que echa mano el director brindan más elementos de interpretación.) Aquí la secuencia.